Lluvia y matemáticas

Alumnas de 1º y 2º de ESO construyendo un metro cuadrado

Matemáticas para medir el agua de lluvia: pluviómetros.

La medición del agua de lluvia es una tarea que se realiza desde la antigüedad. Existen datos del año 500 antes de Cristo sobre instrumentos utilizados con esta finalidad. Habida cuenta de que se trata de medir un volumen, parece algo sencillo, y lo es, pero el problema es reducir los errores en la recogida del agua. Si el recipiente elegido tiene mucha superficie, cualquier variación en la altura causada por la inclinación del terreno o un descuído se multiplica por este área, dando un error considerable.
Para paliar este problema se han diseñado instrumentos llamados pluviómetros, con una "boca" de recogida que lleva el agua hacia un cilindro más estrecho, y con suficiente altura, de forma que se minimiza el error que corresponde a la componente vertical.

Profesores de matemáticas junto a la caseta meteorológica y el pluviómetro del IES DAVIÑA REY
En un interesante artículo de la web http://www.divulgameteo.es José Miguel Viñas explica los elementos matemáticos que subyacen en la toma de datos del agua caída. Recomendamos escuchar el audio http://www.divulgameteo.es/uploads/13-10-2012.mp3
Se trata de establecer una proporción entre el volumen del aparato y el de una superficie de un metro cuadrado cuya altura se contabiliza por milímetros, cada milímetro equivale a un volumen de un litro por metro cuadrado, (recuerda que 1 litro = 1 dm x 1 dm x 1 dm = 100 mm x 100 mm x 100 mm, y que 1m x 1m x 1mm = 1000 mm x 1000 mm x 1 mm).
En lenguaje cotidiano se habla de un milímetro como si fuese un litro, se supone que conocemos la gráfica anterior y por ello imaginamos una bandeja de superficie un metro cuadrado con esa altura.
Con respecto al pluviómetro, el que vemos en la foto, donación de MeteoGalicia por participar en el programa "MeteoEscolas", se trata de un pluviómetro de Hellmann. En nuestro caso la superficie de la boca de captación es de cien centímetros cuadrados, es decir, un decímetro cuadrado, la centésima parte de la superficie utilizada como referencia. Por eso la cantidad de agua que recojamos habrá que multiplicarla por 100 para obtener el dato estándar.
Para ahorrar tiempo los pluviómetros ya traen una probeta interior cuyas marcas hacen ese cálculo. Cada una corresponde a un centilitro de la probeta y esto es un litro en la referencia.

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